Niño con cara de ángel,
de triste mirada
y melancolía alojada,
subyaces en el fondo del cielo
y alimentas tu ser
con cada momento de amor.
Tu camisa coloreada de grises,
camuflaje con mil colores,
de la desatinada humanidad;
pantalón, tejido con hilos del alma,
tus zapatos, de piel curtida por el llanto,
y zurcidos, con sufrimientos de tu bendito corazón.
Eres un quejido de la noche,
que abraza al mundo en solitario.
Naciste en sabanas de seda,
que al venir al mundo,
se transformaron en sábanas de dolor.
Niño, con cara de ángel,
de triste mirada,
congoja, siente mi alma
por el desatino
del mundo sin corazón.
Te dedico una caricia...una nada.
Te dedico una sonrisa...una nada
para ti, que caminas descalzo de amor.
Niño con cara de ángel, pido...
que la ceguera de la humanidad se acabe.
Eres tú, niño de cien y un batallas,
más grandioso que Napoleón.
Niño con cara de ángel,
de carcajada callada,
con ese desgarbo,
manchado por el tizne de una sociedad,
reflejo de su marcada suciedad,
que si desaparecieses,
nadie lo tomaría en cuenta,
por la llamada, dignidad,
hasta que te encontraran en el cielo,
allí, junto a la deidad.
Niño con cara de ángel,
blanco tu corazón,
amor y dolor eres tú,
el niño de la calle, olvidado,
al cual van estos versos…
Con mucho amor
Es tan desproporcionado en este mundo la pobreza de la riqueza y que desafortunadamente estos angelitos sufren las consecuencias de una sociedad inoperante y fría,ángeles olvidados "NIÑOS DE LA CALLE" marginados. Un abrazo.
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