Ternura muy honda,
comunión de amor y deidad.
Magníficamente interpretada
por tu alma entregada.
Tus ojos, como piedras preciosas,
forman en conjunto con el coral
el arrecife más bello jamás constituido
entre el trópico de Cáncer
y el trópico de Capricornio.
Tanta es la belleza que emanas
que todas las especies buscan
calor en tus hermosos jardines.
Y en interminables noches
se extasían conjuntamente,
abrigando sueños eróticos
ausentes de sensatez
en ese, tu arrecife de amor...
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